Los animales
también merecen segundas oportunidades
En los últimos años, el maltrato de mascotas ha aumentado drásticamente
MÓNICA DÍAZ HERNÁNDEZ. Fuenlabrada. 03/12/14
Abandonado y maltratado, sin recibir ningún tipo de cuidado médico ni higiénico. Atado a un tractor mediante con una cuerda y en grave estado de desnutrición. Así vivió durante un año Nico, un bóxer blanco, hasta que fue encontrado por la asociación PROA. Como él, viven situaciones similares los casi 300.000 animales abandonados en nuestro país.
En el año 2013 se notificaron 13.496 casos de maltrato animal al Seprona todo el ámbito nacional. Estos datos han ido creciendo con el paso de los años precipitadamente. En el año 2008, en la Comunidad de Madrid, tan solo se registraron 27 casos de maltrato a perros, mientras que en 2013 aumentó a 1.154 casos.
La mayoría de los animales abandonados presentan importantes problemas de salud debido a la carencia de las condiciones básicas de higiene o el incumplimiento de los cuidados sanitarios que quedan reflejadas en el Código Penal, individual para cada comunidad del país.
Muchas de las razones que intentan justificar del abandono de los animales hacen referencia a la situación económica inestable actual y la falta de responsabilidades por parte de los dueños, según aseguran los expertos. Además, otra de las causas influyentes es la aparición de modas esporádicas basadas en adquirir unos tipo más específicos de animales. Así lo explica Flavia Gómez, estudiante de veterinaria de la Universidad Complutense: "Ahora está de moda tener un mapache o un oso de la miel. Es un animal salvaje, no para tenerlo en casa, y en poco tiempo de cansarán de él".
En la actualidad, la protección de los animales está muy estrechamente relacionada con las adopciones y las asociaciones de animales que defienden sus derechos. Debido al incremento de animales abandonados, este tipo de asociaciones se ha visto en aumento. Por este mismo motivo, los ciudadanos también acuden a los centro municipales para realizar entregas de sus mascotas, en lugar de desatenderlas.
Para dar una nueva oportunidad a los animales abandonados, desde las protectoras se llevan a cabo procesos de adopción, a través de completar los datos solicitados en una estancia general y una pequeña entrevista personal. Otro proceso en auge es la apadrinación de animales, una solución más económica y eficaz, si no se dispone de las instalaciones adecuadas. Consiste en aportar una cuota mensual para el mantenimiento del animal en un centro especializado, con derecho visitas y a recibir información sobre su estado.
Las asociaciones y protectoras también llevan a cabo la labor de cuidado de animales. Pero la crisis ha afectado a su financiación, ya que las subvenciones han ido reduciéndose a hasta desaparecer. Tan solo unas pocas, asociadas a los ayuntamientos locales reciben ayudas de la Comunidad de Madrid. Las protectoras no asociadas tienen que buscar métodos diferentes de financiación, como las donaciones de los socios o grandes empresas, complementarias a las aportaciones de las adopciones. Este caso se identifica con PROA, una protectora de animales situada en la localidad de Alcorcón, que a falta de presupuesto busca donantes empresas de logística. "El gasto en pienso para los perros y gatos del centro es más de 1800€, que cubrimos gracias a la donación de afinitty", cuenta Esther Luengo, voluntaria en el centro.
Colaboración con centros europeos
La colaboración entre centros de protección animal se ha convertido en un acto fundamental. Para el bienestar de los animales. Ayudar a centros cercanos, en cuanto cesión de animales, ya era algo común hace años, pero en los últimos años se ha observado que la colaboración con centros de acogida europeos genera grandes beneficios para los animales. Esto se debe a que la calidad de los cuidados recibidos en los animales en los países centro europeos son mayores que en España. "Ultimamente muchos perros están yendo a Alemania e Italia", comenta Anna B. Alegret, encargada de la administración del centro de protección animal municipal de Fuenlabrada.
La conservación de las instalaciones es un factor muy influyente en la calidad de los cuidados que reciben. Un ejemplo de ello es Bélgica. En este país los centros de animales reciben subvenciones por parte del estado para el mantenimiento de los cheniles o gateras. "La diferencia entre los cheniles que hay aquí y los del los países europeos es increíble. Siempre están muy limpios y bien habilitados.", explica Laura Abad, estudiante de veterinaria.
El seguimiento realizado en las familias que adoptan las mascotas es más exhaustivo que el realizado en España, según comenta Esther de PROA: "El control que hacen es mucho más detallado. Las asociaciones con las que trabajamos realizan visitas en las casas para confirman que el animal tiene un lugar adecuado y adaptado a sus necesidades, además de comprobar el estado del propio animal".
Consecuencias del abandono
Cuando un animal es abandonado, no solo sufre malnutrición o falta de cuidados. Las consecuencias van más allá. Recientemente, en las localidades de Fuenlabrada, Getafe, Leganés y Valdemoro comenzó a detectarse un brote de leishmaniasis humana. Los primeros estudios señalaban al parque Bosque Sur, que conecta Fuenlabrada con Leganés. El foco de la infección procedía de la proliferación de liebres. Tras su vacunación, el problema ha continuado en aumento. “ Hace poco hemos descubierto que los gatos abandonados también están infectados. Entonces, creamos un convenio con la asociación Madrid Felina para recuperar a los animales”, explica Anna B. Alegret.
Los traumas psicológicos también suponen un problema. Como consecuencia del abandono, los animales sufren trastornos en la conducta. “Mi perro fue abandonando cuando ni siquiera había terminado de amamantar y ahora cuando ve un perro pequeño y se asusta” declara Sandra Santos , una estudiante de veterinaria que adopto a su pastor alemán.
Para mejorar el comportamiento, los etólogos o terapeutas de comportamiento estudian la conducta animal y plantean tratamientos psicológicos para superar estos problemas. “Antes de tratar el comportamiento de un animal, hay que trabajar con los bloqueos que presenten, ya que estos son los que producen las conductas negativas”, afirma José Luis Arias, terapeuta de comportamiento canino en el centro Dog Star.
Para evitar las consecuencias que produce la práctica del maltrato animal o el abandono, muchas son las asociaciones que realizan campañas de concienciación. Un ejemplo, es el spot publicitario realizado F.A.P.A.M. A pesar de haber recibido numerosas críticas debido a su dureza, pretende transmitir un mensaje claro, bajo el eslogan "No compres, adopta". "Se trata de concienciar a la gente de algo que ocurre", explica el actor Enrique Villén, quien ha participado solidariamente en la campaña.
En los últimos años, el maltrato de mascotas ha aumentado drásticamente
MÓNICA DÍAZ HERNÁNDEZ. Fuenlabrada. 03/12/14
Abandonado y maltratado, sin recibir ningún tipo de cuidado médico ni higiénico. Atado a un tractor mediante con una cuerda y en grave estado de desnutrición. Así vivió durante un año Nico, un bóxer blanco, hasta que fue encontrado por la asociación PROA. Como él, viven situaciones similares los casi 300.000 animales abandonados en nuestro país.
En el año 2013 se notificaron 13.496 casos de maltrato animal al Seprona todo el ámbito nacional. Estos datos han ido creciendo con el paso de los años precipitadamente. En el año 2008, en la Comunidad de Madrid, tan solo se registraron 27 casos de maltrato a perros, mientras que en 2013 aumentó a 1.154 casos.
La mayoría de los animales abandonados presentan importantes problemas de salud debido a la carencia de las condiciones básicas de higiene o el incumplimiento de los cuidados sanitarios que quedan reflejadas en el Código Penal, individual para cada comunidad del país.
Muchas de las razones que intentan justificar del abandono de los animales hacen referencia a la situación económica inestable actual y la falta de responsabilidades por parte de los dueños, según aseguran los expertos. Además, otra de las causas influyentes es la aparición de modas esporádicas basadas en adquirir unos tipo más específicos de animales. Así lo explica Flavia Gómez, estudiante de veterinaria de la Universidad Complutense: "Ahora está de moda tener un mapache o un oso de la miel. Es un animal salvaje, no para tenerlo en casa, y en poco tiempo de cansarán de él".
En la actualidad, la protección de los animales está muy estrechamente relacionada con las adopciones y las asociaciones de animales que defienden sus derechos. Debido al incremento de animales abandonados, este tipo de asociaciones se ha visto en aumento. Por este mismo motivo, los ciudadanos también acuden a los centro municipales para realizar entregas de sus mascotas, en lugar de desatenderlas.
Para dar una nueva oportunidad a los animales abandonados, desde las protectoras se llevan a cabo procesos de adopción, a través de completar los datos solicitados en una estancia general y una pequeña entrevista personal. Otro proceso en auge es la apadrinación de animales, una solución más económica y eficaz, si no se dispone de las instalaciones adecuadas. Consiste en aportar una cuota mensual para el mantenimiento del animal en un centro especializado, con derecho visitas y a recibir información sobre su estado.
Las asociaciones y protectoras también llevan a cabo la labor de cuidado de animales. Pero la crisis ha afectado a su financiación, ya que las subvenciones han ido reduciéndose a hasta desaparecer. Tan solo unas pocas, asociadas a los ayuntamientos locales reciben ayudas de la Comunidad de Madrid. Las protectoras no asociadas tienen que buscar métodos diferentes de financiación, como las donaciones de los socios o grandes empresas, complementarias a las aportaciones de las adopciones. Este caso se identifica con PROA, una protectora de animales situada en la localidad de Alcorcón, que a falta de presupuesto busca donantes empresas de logística. "El gasto en pienso para los perros y gatos del centro es más de 1800€, que cubrimos gracias a la donación de afinitty", cuenta Esther Luengo, voluntaria en el centro.
Colaboración con centros europeos
La colaboración entre centros de protección animal se ha convertido en un acto fundamental. Para el bienestar de los animales. Ayudar a centros cercanos, en cuanto cesión de animales, ya era algo común hace años, pero en los últimos años se ha observado que la colaboración con centros de acogida europeos genera grandes beneficios para los animales. Esto se debe a que la calidad de los cuidados recibidos en los animales en los países centro europeos son mayores que en España. "Ultimamente muchos perros están yendo a Alemania e Italia", comenta Anna B. Alegret, encargada de la administración del centro de protección animal municipal de Fuenlabrada.
La conservación de las instalaciones es un factor muy influyente en la calidad de los cuidados que reciben. Un ejemplo de ello es Bélgica. En este país los centros de animales reciben subvenciones por parte del estado para el mantenimiento de los cheniles o gateras. "La diferencia entre los cheniles que hay aquí y los del los países europeos es increíble. Siempre están muy limpios y bien habilitados.", explica Laura Abad, estudiante de veterinaria.
El seguimiento realizado en las familias que adoptan las mascotas es más exhaustivo que el realizado en España, según comenta Esther de PROA: "El control que hacen es mucho más detallado. Las asociaciones con las que trabajamos realizan visitas en las casas para confirman que el animal tiene un lugar adecuado y adaptado a sus necesidades, además de comprobar el estado del propio animal".
Consecuencias del abandono
Cuando un animal es abandonado, no solo sufre malnutrición o falta de cuidados. Las consecuencias van más allá. Recientemente, en las localidades de Fuenlabrada, Getafe, Leganés y Valdemoro comenzó a detectarse un brote de leishmaniasis humana. Los primeros estudios señalaban al parque Bosque Sur, que conecta Fuenlabrada con Leganés. El foco de la infección procedía de la proliferación de liebres. Tras su vacunación, el problema ha continuado en aumento. “ Hace poco hemos descubierto que los gatos abandonados también están infectados. Entonces, creamos un convenio con la asociación Madrid Felina para recuperar a los animales”, explica Anna B. Alegret.
Los traumas psicológicos también suponen un problema. Como consecuencia del abandono, los animales sufren trastornos en la conducta. “Mi perro fue abandonando cuando ni siquiera había terminado de amamantar y ahora cuando ve un perro pequeño y se asusta” declara Sandra Santos , una estudiante de veterinaria que adopto a su pastor alemán.
Para mejorar el comportamiento, los etólogos o terapeutas de comportamiento estudian la conducta animal y plantean tratamientos psicológicos para superar estos problemas. “Antes de tratar el comportamiento de un animal, hay que trabajar con los bloqueos que presenten, ya que estos son los que producen las conductas negativas”, afirma José Luis Arias, terapeuta de comportamiento canino en el centro Dog Star.
Para evitar las consecuencias que produce la práctica del maltrato animal o el abandono, muchas son las asociaciones que realizan campañas de concienciación. Un ejemplo, es el spot publicitario realizado F.A.P.A.M. A pesar de haber recibido numerosas críticas debido a su dureza, pretende transmitir un mensaje claro, bajo el eslogan "No compres, adopta". "Se trata de concienciar a la gente de algo que ocurre", explica el actor Enrique Villén, quien ha participado solidariamente en la campaña.
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